«Jesús, yo nada soy. Tengo sed de vivir y respirar solamente para ti»
Venerable2-7-1994 Beatificación19-6-2005
Nació en Pruchnik (Polonia), el 13 de julio de 1842. Sexto hijo de una numerosa familia, pronto comprendió la importancia de una vida honesta y responsable, en la dramática situación de su patria y del mundo, dividido entre el ateísmo de los más pobres y el materialismo de los más ricos. Ingresó en la congregación salesiana en Turín (Italia) e hizo sus votos perpetuos en manos de Don Bosco. Observando atentamente la orientación de los cambios del mundo entero, comprendió que el alejamiento de Dios y el abandono a los instintos provocan daño a las personas, a las familias y a las naciones. Para frenar el avance del ateísmo y para limitar las consecuencias de la decadencia de las buenas costumbres, se entregó, desarrolló la actividad catequística y dedicó toda su vida pastoral, educativa y editorial para incentivar y valorizar la virtud de la templanza y de la laboriosidad. En Polonia, organizó casas de educación para la juventud abandonada y pobre, fundo la sociedad “Templanza y Trabajo” (1897), germen de la futura congregación religiosa San Miguel Arcángel, constituida por religiosas, sacerdotes y hermanos laicos y reconocida como parte de la Familia Salesiana, que hoy continúa haciendo realidad el legado espiritual de su fundador.
Bronislao murió en Miejsce Piastowe (Polonia) el 29 de enero de 1912.